Desde que llegamos a L.A. una de nuestras prioridades era asistir a un partido de los Lakers y este deseo se concretó gracias a que Mr. Williamson, mi padre norteamericano, consiguió entradas.
Al llegar, nuestras caras lo decían todo. El estadio era enorme, con una pantalla cúbica gigante en el centro del techo. Tenía de todo: tiendas, bares, escaleras mecánicas, pisos alfombrados, etc.
Todo estaba hecho para disfrutar más del entorno que del partido en sí, la músi
ca alta durante todo el encuentro deportivo, las porristas, la pantalla filmando a ciertos sectores de la hinchada, los fans gritando cánticos, como "defense" o "let's go Lakers", entre otras cosas. Sin embargo, el partido fue emocionante, ya que como algunos habrán visto por ESPN, 'líder mundial en deportes', los Spurs ganaron por un punto en el último segundo de juego. A pesar deque todos los fans de los Lakers se fueron tristes, nosotros estabamos felices por el espectáculo que disfrutamos. Muchas gracias Mr. and Mrs. Williamson.
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